Contractivas descendentes

Tras su final que suele estar en la zona baja de una tendencia bajista se produce un giro al alza o quizá solo un rebote que generalmente ocurre tras realizarse una onda bajista más. La medición de la distancia que produce homotecias se toma antes de la expansiva y tal homotecia tiene traslados. Estas homotecias marcan objetivos tanto alcistas como bajistas y aunque podría llamar a unos directos y a los otros por fallo no vale la pena distinguirlos.

Es el tipo de contractiva que se forma con un mínimo, un máximo, un mínimo y un máximo, que uniendo con una línea máximo con máximo o sus proximidades y con otra línea mínimo con mínimo, tienen ambas líneas pendiente negativa, o sea, que convergen hacia el futuro.

Numeración y objetivos

A las contractivas también, a los solos efectos educativos, les numero sus puntos importantes, pero la numeración va al revés en estas descendentes, como se puede apreciar en el siguiente gráfico. La medición de la distancia que produce una homotecia se realiza entre los puntos 5 y 5a, que se han producido antes de contractiva. Las directrices pasan por los máximos 1 y 3 y por los mínimos 4 y 2, o por lugares cercanos, de modo que entre esos máximos o esos mínimos (o los lugares cercanos) no corten el precio por ningún lugar.

Ejemplos de contractivas descendente en las que se puede apreciar los puntos 1, 2, 3, 4, 5, 5a y lugares de corte de alguna prolongación de las directrices con la cotización. Obsérvese que en estas contractivas descendentes la numeración, que tan solo tiene propósitos formativos, obedece a una cronología inversa.

La propia distancia entre los puntos 5 y 5a tiene su homotecia sin hacer ningún traslado. Además, tal homotecia tiene traslados tanto al punto máximo 1, como al mínimo 2, así como a los puntos de corte de las prolongaciones de las directrices con la cotización.

Dos contractivas descendentes con sus puntos 1, 2, 3, 4, 5 y 5a. La primera no alcanza en su rebote ningún objetivo alcista y ya dejaba claras intenciones bajistas. La segunda sí produjo un solo objetivo alcista.

Que venga un giro o un rebote al finalizar la contractiva descendente o tras consumir una onda más a la baja no presupone que se alcance un objetivo alcista. Si no se alcanza, debemos pensar en objetivos bajistas calculados con la misma medición indicada, pero invertida, que produce su homotecia  y esta tiene los mismos traslados descritos.

Contractiva descendente con objetivos bajistas. En ocasiones el mínimo de la contractiva era ya objetivo, si bien tal objetivo no era previsible porque la contractiva no estaba construida, pero tal hecho nos sirve para considerar que los objetivos serán bajistas.

En los procesos bajistas es muy frecuente encontrar estas contractivas descendentes y ocurre frecuentemente, como con las expansivas simétricas, que aparecen muchas, que se solapan entre ellas o que se anidan, marcando unos objetivos bajistas y otras alcistas. A veces, como en la cotizada anterior llegan a compartir puntos importantes.

Contractiva descendente observada en barras de 1 minuto en una cotizada.

Contractiva descendente con objetivos bajistas. La cotización ha llegado a rebasar el último objetivo alcanzado y es de esperar que tienda a ir a buscar el siguiente.

Aunque en los rebotes puedan este tipo de contractiva dar objetivos claros de subida pronto suelen terminar sus objetivos en tal rebote. Podría decir que marcan objetivos casi exclusivamente iniciales de los giros y que el resto de la subida obedezca a otros calculados por otros métodos.

Es importante recordar que cuando aparecen pronto habrá rebote independientemente de su tamaño. Si no llega el retobe a ningún objetivo alcista hay que considerar rápidamente posibles objetivos bajistas.

Contractivas descendentes. Una con objetivo bajista y la otra con objetivos alcistas.

Contractiva descendente de resolución alcista, incluyendo un objetivo en un gap.

Con los ejemplos puestos se ha podido observar cómo estas contractivas descendentes tienen un comportamiento predictivo local muy pequeño, que obedece perfectamente al escalamiento fractal. He puesto gráficos con frame-time de 1 minuto a 1 día y se han podido establecer objetivos muy locales para cada escalamiento. Otros métodos como el de las directrices o el crecimiento fractal consiguen anticipar objetivos de más distancia, su localismo es más extenso que el de este tipo de contractivas. La construcción de una cotización es multifractal y existen muchas cuasi transformaciones afines que podría llamar generadores de cotización interfiriéndose y potenciándose o aniquilándose unas a otras y cada una con un alcance local distinto.

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