El tercer tipo de expansiva es la simétrica, les llamo así porque se asemejan a los triángulos simétricos de la teoría de ondas de Elliott. En ellas, una directriz une dos máximos ascendentes y la otra directriz dos mínimos descendentes. Existen dos formas de estas expansivas: las que se forman con máximo, mínimo, máximo y mínimo, por ese orden, y las que se forman con mínimo, máximo, mínimo y máximo, por ese orden. Ambas directrices divergen, teniendo pendiente positiva la que une máximos y pendiente negativa la que une mínimos.
Aunque se pueden encontrar las expansivas simétricas en cualquier parte de una cotización, su lugar predilecto es en los finales de tendencias alcistas de tiempos largos, principalmente finales de tendencias alcistas primarias y secundarias, marcando claramente zonas de distribución. Están presentes en los finales de ciclos alcistas y son las formaciones del análisis técnico que en inglés llaman megaphone top y que en castellano aparecen en algún manual de análisis técnico como megáfonos. De estos megáfonos o megaphone top poco dicen estos manuales más que aparecen al final de un recorrido alcista y auguran caídas sin especificar cuántas. Esto tiene arreglo, porque las expansivas simétricas tienen objetivos de precio, no solo de caídas, sino que también de subidas, como pronto expondré.
Después de la expansiva formada por los puntos 1, 2, 3 y 4 viene un punto 5 y un punto 5a posteriores, como en las expansivas ascendentes y puede haber un punto 5b, pero no es relevante para cálculos salvo que este sea un máximo por encima del punto 5 y que excepcionalmente sea el final de la tendencia alcista. El orden de numeración puede comenzar por un mínimo o por un máximo.
Estas expansivas simétricas, más que los otros dos tipos de expansivas, tienen tendencia a anidarse unas con otras, a solaparse o a que una misma directriz sea compartida por dos de ellas. Generalmente, todas las que aparecen en una misma zona de la cotización suelen predecir algunos objetivos de precio que se cumplen bien al alza bien a la baja, hasta que al final una única expansiva simétrica marca el camino a la baja.
La aparición de estas expansivas simétricas en una zona de objetivo directos de una expansiva descendente que se hubiese formado en el inicio de la tendencia primaria debe de hacernos considerar que se ha llegado al final de subidas, que se está en plena época de distribución y que, aunque pueda haber dentelladas alcistas, el camino va a ser irremediablemente a la baja. En alguna ocasión tras formarse estas expansivas en lo que hasta el momento de su aparición es lo más alto de la cotización, esta sube y sube, pero generalmente marcan un final próximo de subidas. Con las expansivas simétricas pueden coexistir expansivas ascendentes que todavía estén proporcionando objetivos alcistas por fallo, indicando estas también el posible final de la tendencia alcista cuando la cotización no llegue a alcanzar un siguiente objetivo por fallo.
El final de recorrido alcista generalmente es el máximo que se produce en el punto 3 o en el punto 4 de una expansiva simétrica, aunque puede ser el punto 5 o 5a e incluso el 5b, pero son escasas las situaciones de final de tendencia alcista fuera de los puntos 3 o 4.
Ejemplos de expansivas simétricas con sus puntos 1, 2, 3, 4, 5 y 5a.
Objetivos
Como generalmente habrá una expansiva simétrica última que pronostique caídas podría considerarse como objetivos directos los bajistas y por fallo los alcistas, pero no hay modo de distinguir a priori si va a haber tras una expansiva simétrica objetivos directos o por fallo, apareciendo ambos en expansivas que se inician con un mínimo o con un máximo. Por tal, se debe suponer en cada expansiva unos posibles objetivos alcistas y otros posibles objetivos bajistas y cuando se produce alguno en un sentido anular los posibles del otro sentido.
Como en el caso de los objetivos directos de las expansivas ascendentes o los primeros objetivos directos de las expansivas descendentes tan solo hay un tipo de homotecia de la distancia 5 – 5a, y varios traslados de ella. El conjunto borroso tiene un único elemento número borroso y las homotecias de la distancia (d) son el producto de esta por el número borroso:
Los objetivos de precio dibujados en los gráficos se sitúan entre 2,61803d ··· 2,75417d. Los traslados de la homotecia son al punto 3, al punto 4, así como a los lugares de corte de las directrices con la cotización, particularmente de la directriz inferior. Es decir, que la propia medición de la distancia d da ya un objetivo alcista y uno bajista como resultado de una homotecia y su inversa, también tenemos el traslado de ambas homotecias al punto 3, o sea, un objetivo alcista y uno bajista arrancando esas homotecias inversas una de la otra en el punto 3, ocurre lo mismo con los traslados al punto 4 y a los cortes de la cotización con las prolongaciones de las directrices. En el momento en el que se produce un objetivo alcista o bajista todos los de sentido contrario quedan anulados, si el primero en producirse es alcista los bajistas quedan anulados y si el primero en producirse en bajista serán los alcistas los anulados.
En ocasiones sus objetivos tardan tiempo en lograrse y/o para alcanzarse hay mucho recorrido de precio, es por ello que el dibujo de las directrices ha de ser muy preciso, porque sus prolongaciones son importantes para calcular objetivos de trasladando del inicio de la homotecia a los puntos exactos donde corten con la cotización.
Tras el punto 4 de la expansiva, uno puede tener dudas respecto del lugar en el que se produce el punto 5 y el lugar del punto 5a, porque en ocasiones no es algo obvio y se pueden producir o interpretar dos o más situaciones. Generalmente ambas o más posibilidades dan objetivos bien precisos y suelen cumplirse.
Expansiva simétrica en la que se puede observar que existen dos posibles lugares donde situar 5 y 5a y por ello hay que hacer las dos mediciones y sus traslados. De la primera posibilidad existieron 3 objetivos bajistas producidos y de la segunda posibilidad uno.
En esta expansiva simétrica, como en la anterior, existen dos posibles lugares donde situar 5 y 5a.
Si en las expansivas simétricas es frecuente que podamos pensar en varios lugares donde situar los puntos 5 y 5a, como se ha visto en estos dos ejemplos anteriores, aún es más frecuente que en las zonas de distribución no paren de aparecer. Es lo que veremos en el gráfico siguiente: expansivas simétricas que se forman continuamente. Esto ocurre cuando desean mantener precios altos y hacer creer en subidas futuras al infinito y el más allá. Afortunadamente aparecen estas formaciones, que son un predictor para caídas o por lo menos para asimilar que se está distribuyendo y que no es aconsejable comprar para largo.
Diversas expansivas simétricas aparecidas en un periodo de un año en un índice. Esta concentración de expansivas simétricas anidadas y solapadas sugiere distribución y prontas caídas.
Antes de la expansiva simétrica dibujada se puede apreciar otra, después de la dibujada hay unas cuantas más. La dibujada es la que se sitúa en el máximo de la cotización y desde ella se inician las caídas. Es la que predice objetivos por los que la cotización irá marcando mínimos en su caída.
Se puede observar que hay dibujados tres lugares distintos donde emplazar los puntos 5-5a, dando las tres homotecias distintas de caídas.
Las dudas en el momento de considerar posibles mediciones en las expansivas simétricas no son las únicas con las que nos encontramos. Generalmente, las expansivas simétricas aparecen en grupos y en una zona de la cotización más o menos lateral en la que abundan dientes de sierra, idas y venidas de la cotización, zonas en las que parece que el ruido ha aumentado, que la dimensión fractal de esa zona crece, aproximándose más a 2 que antes o, dicho de otro modo, que el exponente de Hurst de la zona disminuye respecto de la zona anterior. En tales circunstancias se hace difícil considerar qué expansivas elegir, pues hay muchas. Es lo que ocurre en el siguiente gráfico. De entre las varias expansivas que se forman, he elegido tres que parecen las más importantes.
Expansivas simétricas en una cotizada producidas durante 14 meses. En esta concentración de expansivas simétricas he considerado las que aparecen en el gráfico como importantes, siendo la central, que contiene el mayor máximo, la principal, que marca el mínimo alcanzado en el gráfico y si la cotización continuase cayendo también futuros mínimos.
Esporádicamente pueden aparecer en cualquier parte, pero es durante el proceso de agotamiento de las subidas donde las expansivas simétricas hacen su aparición por lo general, y esta aparición se convierte en abundancia en muchas ocasiones. En el proceso de agotamiento de las subidas, aparecen expansivas simétricas que marcan indistintamente objetivos alcistas o bajistas y suele ser una única expansiva la que marca el camino de la cotización a la baja, pero en ocasiones varias pueden apuntar hacia las mismas caídas. Si de una expansiva simétrica se detecta que todavía la cotización no haya realizado ninguno de sus objetivos, aunque sí de expansivas posteriores, debemos de considerar que ya marcará alguno, cosa que suele ocurrir cuando las caídas toman cuerpo.
Diversas expansivas simétricas que vienen apareciendo en esta cotización, algunas con objetivos alcistas y otras bajistas.
Diversas expansivas simétricas que anticipan la cercanía de caídas y algunos objetivos.
Desarrollo de los diversos objetivos de caída de las dos últimas expansivas mostradas en el gráfico anterior.